martes, 22 de enero de 2008

martes 22 de enero de 2008... 10:15pm

INCIPIT






No comprendo bien todo lo que esta ocurriendo ultimamente en mi vida, al principio fue esa extraña sensacion de libertad... ahora mas tranquilo, comienzo a asustarme.




Estoy aqui cuando quiero estar allá, y estoy allá cuando quiero estar en otro lado.




Ahorita ando por el ciber que acostumbro frecuentar desde que me mude a mi departamento, esta es la hora de "los abandonados", asi nos llama el dueño del ciber a todos los que venimos a esta hora.


Ultimamente voy saliendo de este lugar pasadas las once de la noche y al salir del ciber me llevo en la espalda correos que lei, mecargo una mochila de nostalgia, dos libretas de recuerdos extraviados y una botella de lagrimas de dos litros.




Hoy hay luna llena, cuando esto pasa, cosas extrañas suceden... como no sentirme influenciado por ella cuando nuestro cuerpo es mas agua que otra cosa, y asi como la luna afecta la marea creo que tambien lo hace conmigo... es esa bella, misteriosa y caraja influencia de la luna.




He dado cuatro vueltas por el jardin tratando de encontrar algo, buscando en las bancas nose que, mirando los faroles y en ellos a los insectos que como idiotizados se estrellan contra el farol una y otra vez (que tercos...pero los admiro... sueñan que lo pueden lograr nose) , compre una, dos y tres paletas de limon, me sente 10 minutos mirando a un perro morder una bolsa de basura tratando de encontrar algo que le permita vivir mas tiempo, y de pronto ya no era ese perro, era yo de la misma forma que el tratando de buscar en mi propia basura algo que me permita por lo menos dormir tranquilo esta noche...


He tenido pesadillas, una tras otra, a veces dormido... otras despierto.




Me senti muy "salsa" y dije sin pensar: "¡QUE LIBRE SOY!"... y en realidad me siento prisionero de mi mismo, limitado, amarrado y comenzando a amar.




....me levante de la banca y volvi a dar una vuelta al jardin por ultima vez, camine a un cafe y me sente nose para qué, me trajeron la carta y en cuando la joven de "cara triste" se dio la vuelta yo hice lo mismo y me sali del lugar, tenia muchas ganas de ver llover sobre mi y solo podia ver la luna encima de mi, ejerciendo su poder y sarandeandome de un lado a otro.


Entre a la iglesia solo a dar gracias y me sali... camine otros pasos mas y luego corri con todas mis fuerzas a mi departamento, avente todo lo que llevaba conmigo y me quite la ropa listo para dormirme, pero al comenzar a quedarme dormido tuve otra pesadilla, me desperte, me vesti y me volvi a salir a la calle... asi llegue aqui, a la hora de los "abandonados"... yo le llamo "la hora del refugio".




Aqui sigo tratando de decirle a la luna, que no importa lo que hoy hizo conmigo, mañana amanecere bien, listo, sano y con animos para otro dia de trabajo... ¡asi debe ser!!




Antes de que todo esto pasara, en la tarde como a las seis, hable con Carlos Morales, debo darle gracias y mandarle, si me lo permite otra vez, una abrazo del lado izquierdo... TU BLOG SE ESTA CUAJANDO!!!... Oye tienes que explicarme eso de "musicalidad"




Gracias a Dorian, Fredy, Omar, Luz,Giovanna, Cinthya... GRACIAS a todos de verdad por sus comentarios, por compartir, por estar ahi y hojala tambien por sentir... ese es el motivo.




Tengo que irme, la luna me esta buscando y creo que ya me encontro.




Antes de dormir quiero tomarme una taza de cafe, sentarme en mi "puf" y leer un poco de los post que encontre un dia que la lluvia me trajo a este ciber por primera vez, quiero leer un poco de esos "designios" y mas de esa "odisea"...




Nos vemos... quiero decir que escribire pronto... GRACIAS TOTALES y buenas noches.




atte.




Sergio L.






FINIS

22 DE ENERO DE 2008, MARTES 4:53 pm




METAMORFOSIS
Era un cautivo beso enamorado
de una mano de nieve que tenía
la apariencia de un lirio desmayado
y el palpitar de un ave en la agonía.
Y sucedió que un día,
aquella mano suave
de palidez de cirio,de languidez de lirio,
de palpitar de ave,
se acercó tanto a la prisión del beso,
que ya no pudo más el pobre preso
y se escapó; mas, con voluble giro,
huyó la mano hasta el confín lejano,
y el beso que volaba tras la mano,
rompiendo el aire, se volvió suspiro.
Luis G. Urbina